Hoy nos hacemos eco de un artículo publicado por la Asociación Protectora de Animales Felinos Bilbao.
«Os vamos a contar una historia real. Una historia dolorosa y sin final feliz.
Ayer, una de nuestras gatitas adoptadas perdió la vida por culpa de una de esas ventanas que, mucha gente, piensa que no son peligrosas y en las que no se ponen medidas de seguridad porque «mi gato nunca pasa por ahí». Pero no es así.
Los adoptantes de nuestra gatita, nos han permitido contaros la historia. Ellos quieren que todo el mundo conozca el peligro real de este tipo de ventanas y así poder evitarlo.»
Podéis leer el artículo completo AQUÍ.