Juanola

Ayer nos despedimos de ti, querida Juanola. Después de 10 años con nosotros, has emprendido el viaje al cielo de los gatitos. Todos nos duelen cuando se van, pero contigo nos sentimos un poco más vacías que de costumbre. Nuestra brujita negra, ¿cómo podía albergar un corazón tan grande un cuerpo tan pequeñito? Has sido un ejemplo de valentía, fuerza y ganas de vivir constante. Tus ojitos tristes de ver cómo tus amigos iban partiendo uno a uno, hasta que Yoppy se fue y un poco de ti se fue con él. Teníamos la sensación de que le echabas de menos, que buscabas acurrucarte con él en su cama y robarle la lata. Y desde entonces hay una parte de ti que se fue apagando poco a poco. Juanola, hemos sufrido contigo tus subidas y bajadas, pero valía tanto la pena cuando entrábamos en la habitación y empezabas a dar saltitos de felicidad. Y cuando roncas tuyas al curarte las hereditas. O incluso cuando no querías saber nada de nosotros y nos dabas la espalda… ¡Eres una gata tan única! Pero al final tu hora llegó. Y la sensación es extraña porque pese a estar muy tristes, hay una parte de nosotros que piensa que estarás bien, que ya no hay más dolor y que allá donde has ido te has reunido por fin con tu inseparable Yoppy. Y estamos seguros de que pasarte la eternidad acurrucada con él en su iglú es el mejor final que podías tener, Juanoleta. Gracias por enseñarnos tanto.♥ Vuelta alto brujita!✨ Gracias a todos los voluntarios que han cuidado todos estos años, ya sus padrinos. Juanola se va habiendo sido increíblemente amada♥.