Nina es una gatita dulce y tranquila, pero también tímida y precavida. Seguramente no sea la primera en recibirte si la vienes a conocer, preferirá observar tus movimientos. Pero si le demuestras afecto, paciencia y, sobre todo, le dejas su tiempo, descubrirás cómo disfruta de las caricias cuando se siente segura.