Ruliña es una gata que, como tantas otras, fue abandonada y encontró refugio entre nosotros. Su historia es la de muchos felinos que, tras pasar por experiencias difíciles, recuperan la confianza en los seres humanos gracias al amor y cuidado que reciben en el refugio. Con el paso del tiempo, ha vuelto a confiar en las personas y ahora busca el afecto, disfrutando de caricias y ronroneos que le devuelven la seguridad y la calma.
Aunque ya es una gata adulta sigue siendo muy activa con ganas de jugar y pasarlo bien!
A pesar de compartir su espacio con otros gatos y haber entablado amistad con algunos de ellos, Ruliña muestra una clara preferencia por la compañía humana. Siempre está buscando la interacción con nosotros, con ganas de jugar y recibir muestras de cariño. Por ese motivo, le buscamos una adopción como gata única en un hogar tranquilo donde poder ser feliz.